El pasado sábado, varios miembros de la Asociación Legio Photos VII estuvimos de excursión por Astorga y Santiago Millas, haciendo fotografías del entorno de la catedral y de este último pueblo, a unos 10 km. de Astorga. También paramos en un campo de centeno segado para realizar alguna toma aprovechando las balas circulares de paja contra el cielo típicamente otoñal.
La provincia de León es una de las pocas españolas que aún mantiene en su territorio más de una diócesis, conservándose en la estructura eclesiástica actual las de León y Astorga, siendo esta última una de las más antiguas y extensas de España, pese a que su cabecera no llegue a los 12000 habitantes.
Aprovechando la entrada de un grupo de turistas concertados al palacio episcopal, cruzamos la valla para fotografiar la obra de Gaudí con el marco incomparable del cielo nublado. Estos cielos dan bastante juego y motivan la edición en postproceso de muchas de las fotos...
Aprovechamos la ocasión para hacer unas cuantas fotos en el interior de la catedral, tanto tomas generales como detalles. Por supuesto, sin trípode, utilizando la característica unión de varias tomas a pulso de la Sony A77 (MFNR= multi-frame noise reduction).
No podía faltar la típica foto de grupo (en mi flickr la tenéis más grande con los nombres puestos por si tenéis curiosidad de saber quiénes nos apuntamos a esta excursión).
Si queréis ver quién es quién, en mi flickr están todos etiquetados...
Santiago Millas tiene rincones realmente fotogénicos, pero es un martirio editar las fotos, ya que salen cables por doquier. En algunas los he clonado, pero en otras no me sentía inspirado...
Desde luego, el día estaba propicio para realizar muchas tomas, con esos cielos perfectos. Además, con esa luz homogénea que da el cielo nublado, con solo subir un poco el contraste al revelar los raws, salen colores de cine, por lo que es un lujo hacer las fotos, pero también revelarlas.
Hubo tiempo hasta de hacer alguna caricatura con el 10-20 a los cuatro incautos que se prestaron a ello... pobres, no sabían que las distorsiones del gran angular consiguen retratos únicos :)
Poco antes de dar por finalizada esta salida, en el camino de vuelta paramos en un campo de cereal para intentar componer alguna foto aprovechando las balas cilíndricas de paja y el cielo cubierto de nubes de algodón.
Espero que os haya gustado la salida. ¡Hasta la próxima!
(c) Javier Díaz Barrera, 2013.
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